En México, cada año se tiran 40 millones de llantas usadas y solo el 12% se recicla. Los neumáticos son un producto de desecho difícil de abordar, debido al gran volumen producido, así como a su durabilidad y los componentes de los neumáticos que son perjudiciales para el medio ambiente. Según especialistas, en México se reciclan cerca de 5 millones de llantas en productos orgánicos y en la industria cementera.

Las llantas viejas se pueden utilizar como agregado para el hormigón de cemento o como fuente de combustible alternativa para crear el propio cemento. La mayoría, sin embargo, terminará en en calles, mares, ríos y bosques. El hecho de que los neumáticos no sean biodegradables y sean lo suficientemente resistentes como para resistir la prueba del tiempo significa que dominan una cantidad significativa de espacio en tiraderos.

Contaminación a través de las llantas

A menudo, los neumáticos se queman en lugar de reciclarlos debido a su potencial de combustible, pero las investigaciones muestran que las emisiones de neumáticos encendidos son peligrosas tanto para el medio ambiente como para las personas. La quema de llantas produce humo negro tóxico y la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos (EPA) explica en su documento “Emisiones al aire por combustión de llantas de desecho” que las pruebas de laboratorio muestran que la quema de llantas libera 34 compuestos mutagénicos diferentes al aire. Estos compuestos representan el mayor potencial de efectos nocivos para los sistemas hormonal, inmunológico y nervioso, los pulmones y el corazón, e incluso pueden causar cáncer.

Sin embargo, se necesita la voluntad política de los gobiernos para acelerar la reutilización de neumáticos. La parte más cara del proceso para muchos es la recolección y transferencia de llantas a la planta de reciclaje, por lo que terminan tiradas en algún lugar o quemadas ilegalmente. Aunque existen empresa mexicana que elaboran impermeabilizante reciclado de llanta, aún no son suficientes para reciclar la totalidad de llantas que se generan en el país anualmente.

Otros usos de las llantas recicladas

Las posibilidades de reciclado y reutilización de neumáticos también pueden generar una mayor actividad económica que el simple uso de neumáticos para la combustión, al tiempo que mantienen los neumáticos usados ​​fuera de la corriente de desechos y evitan la liberación de contaminación y emisiones nocivas al medio ambiente. Los neumáticos viejos, además de utilizarse para elaborar impermeabilizantes, se pueden utilizar como materiales de construcción, desde el uso de neumáticos enteros en la construcción de tierra apisonada hasta los pedazos de neumáticos que se convierten en terraplenes de tierra o en aislamiento para carreteras. Algunos productos de ropa, como los zapatos, se pueden crear a partir de cortar y estampar neumáticos, y otro uso común es para canchas deportivas y mantillo para parques infantiles.

Usos creativos

En una escala más individual, a las llantas de desecho también se les puede dar a usos nuevos y creativos. A partir de neumáticos se pueden crear asientos, columpios, jardineras, mesas, equipo de juegos e incluso lámparas. La reutilización de estas ruedas de goma duraderas y versátiles contribuye a una mentalidad general y una práctica de reutilización para las personas y las comunidades. En una empresa o incluso en una capacidad gubernamental, puede desviar literalmente toneladas de desechos de los tiraderos y evitar que se liberen emisiones nocivas al aire mientras utiliza un material conveniente y disponible.

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