Tu dormitorio es el único lugar de tu hogar que está totalmente dedicado a ti, no a alojar a tus amigos y familiares ni a recalentar la comida, por lo que es importante crear un espacio que se sienta como un pedazo de consuelo.
Claro que pueden colocar cojines y agregar algunas bombillas de luz suave, pero pocas cosas pueden arruinar el ambiente relajado de tu dormitorio como un tono de pintura menos que relajante.
Incluso puedes ocupar una lija de agua para renovar todos tus muebles y renovar tus repisas colocadas en tu habitación.
Cuando se trata de tu dormitorio, la belleza está en el ojo del espectador, y tu elección de pintura no es una excepción. Si realmente te gusta un color de pintura, te decimos que lo hagas sin importar nada.
Pero si deseas diseñar tu dormitorio teniendo en mente solo los sueños más dulces, echa un vistazo a los tonos que los expertos en color sugieren evitar.
1. Evita el rojo en tu dormitorio
Aunque te encante un tocador parisino a la antigua, ¡recuerda que esas habitaciones no estaban destinadas principalmente para dormir!
El rojo es un color enérgico que avanza hacia la desagradable sensación de que las paredes se acercan a ti mientras intentas dormir, ¡no es propicio para un estado de ánimo tranquilo y pacífico!
2. Verde brillante
Las habitaciones son un lugar para relajarse y estar sereno, ya que estás allí para dormir en el espacio la mayor parte del tiempo.
Pero, ¿alguna vez has visto un dormitorio amarillo brillante y resaltador? ¿O qué hay del verde lima? Entras en una habitación como esa en la que no querrías dormir, ¡y no podrás hacerlo! Te mantendría despierto por la noche incluso si las luces estuvieran apagadas.
3. Naranja
Hay bastante ciencia detrás de cómo el color afecta el cerebro. Si estás eligiendo un color de pintura para un dormitorio y realmente quieres dormir, nos quedaríamos con azules y verdes apagados.
Los colores que debes evitar son los amarillos, rojos y naranjas brillantes.
4. Cualquier cosa saturada
El color juega un papel importante en la creación del ambiente general del dormitorio. Estos tonos claros y apagados promueven la relajación y la comodidad, creando el estado de ánimo para una buena noche de sueño.
Por otro lado, los colores brillantes y saturados pueden desencadenar una sensación de alerta. Reserva los tonos vivos para paredes llamativas o para habitaciones que requieran mucha energía.
5. Cualquier cosa que no te funcione
No creo que haya reglas estrictas o rápidas para elegir el color de un dormitorio. Todos somos diferentes, y un color que podría causarte dolor de cabeza podría hacer a otra persona súper feliz.
No obstante, generalmente nos alejaríamos de cualquier cosa demasiado brillante. Creo que el dormitorio debe hacerte sentir tranquilo y acogedor.
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